viernes, 29 de abril de 2011

Analizando con el corazón...

Llegó la inspiración...
Tenía sueño, pero no podía dormir, y creo que es porque estaba a punto de sentir estas palabras que comparto a continuación.



Afirmo que ante una situación crítica, en la que uno quiere tomar decisiones que darán un giro importante en la vida (y en ocasiones, sin que esto tenga que ser tan trascendental para uno), conviene escuchar al corazón:

¿Qué es lo que REALMENTE quiero?

El querer no está tanto en la "mente", sino en el corazón.

Todo lo que uno decide, tiene repercusiones en el presente, pero más en el futuro. Y afectarán también a otras personas. Por ello, es importante usar la mente como una herramienta valiosa de reflexión, para analizar con el corazón.

Cuando conectamos con el corazón, sentimos, tenemos sensaciones (intuiciones) que nos señalan lo que sí nos satisface y lo que no, lo que está en armonía con nuestros principios y valores, y lo que no.

Puede ser que nuestras creencias y juicios personales (quizá acertados, quizá equivocados) nos muevan a tomar una decisión, pero estas están más en la mente, que en el corazón. Por ello conviene cuestionar nuestras creencias y juicios.

Mientras más cambios pueda a ocasionar la decisión que se vaya a tomar, más tiempo hay que dedicarle al análisis, para asegurarse que eso es lo que realmente se quiere, y asumir las consecuencias.

Usando la creatividad, se podrán encontrar muchas alternativas. Esta es una habilidad mental que combina el gusto y la alegría que nacen en el corazón.

Finalmente, es desde el Amor (y no desde el Ego), donde se toman las mejores decisiones.

(En otro momento de inspiración detallaré las razones de esta afirmación o creencia).

Ahora sí, lista para dormir :)

Namasté

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